El email marketing no funciona, ¿lo sabías?

Bueno, esto me lo dijo una persona hace tiempo.

Y yo, con mi gran imaginación le puse una metáfora de las que tanto me gustan.

Te cuento:

– A ver, ¿tu usas Tinder verdad?

+ Sí.

– Y quedas con tías de Tinder, ¿verdad?

+ Si.

– ¿Y qué es más fácil, llevarte a esas a la cama o a una de otro lado?

+ A las de Tinder.

– ¿Y por qué crees que es así?

+ Porque ya sabemos que nos gustamos, hay feeling, hemos hablado antes…

Bien, pues el email marketing es igual que Tinder.

Un usuario se suscribe (hace match).

Le envías emails (le hablas).

Te contesta a correos (hay feeling, mantienes una conversación)

Y con el tiempo, entra a tu landing (quedáis para conoceros).

Tal vez entre más veces (quedáis más días).

O tal vez la primera noche (quién sabe, a veces hay suerte)

Pero si seguís quedando, al final habrá ventas. (matraca)

– ¿Lo has entendido ahora?

+ Joder Jesús, nunca lo había visto así.

– Y es que con sexo todo se aprende mejor.

Créeme, está comprobado.

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